El genio es una alquimia. El proceso alquímico es cuádruple:
1) putrefacción;
2) dealbación;
3) rubificación;
4) sublimación.
2) dealbación;
3) rubificación;
4) sublimación.
"Se dejan, primero, pudrir las sensaciones; después de muertas se emblanquecen con la memoria; enseguida se rubifican con la imaginación; finalmente se subliman por la expresión."
Fernando Pessoa